EL
MUNDO
24
junio 2016
Gema García Marcos
Ha llegado el momento de asumirlo de una vez por todas y aprender
a vivir con ella. Dicho en lenguaje de la calle: que no te vendan más 'burras'.
No hay nada que logre borrar para siempre y por completo las huellas de la
celulitis sobre tu piel. Como mucho podrás suavizar la profundidad de esos
pequeños hoyuelos que salpican tus glúteos y muslos pero jamás conseguirás
librarte de ellos del todo. Esa es la cruda realidad. Afróntala y despójate del
pareo.
Aunque digan que "mal
de muchos, consuelo de tontos", quizás le alivie saber que no es la única
-o el único- que la padece. Nueve de cada diez mujeres contemplamos con espanto
cómo brota esa poéticamente denominada piel de naranja, coincidiendo con el
comienzo de nuestra etapa fértil, y nos empeñamos tozudamente en combatirla...
con más ilusión -y dinero malgastado- que buenos resultados. "La celulitis
aparece a consecuencia de la herniación de la grasa normal que existe bajo de
la piel -en la hipodermis-, entre las fibras de tejido conectivo, que son algo
más débiles en las zonas típicas donde se ven esos característicos nódulos:
muslos, caderas y abdomen", explica Alejandro Martín-Gorgojo, doctor de la
Clínica Dermatológica Internacional (Madrid).
"Al no tratarse de una
enfermedad no es apropiado hablar de la existencia de una cura para la
celulitis. No obstante, sí existen formas de tratarla para reducirla",
añade.
Hábitos
El primer paso para
minimizar su molesta presencia en nuestras cartucheras sería "adoptar un
estilo de vida saludable». Es fundamental «evitar el tabaco, hacer ejercicio
físico de forma regular, hidratarse bien y seguir una dieta equilibrada». Todos
estos consejos, además de resultar beneficiosos para la salud, pueden
"contribuir a mejorar la celulitis". Así que no hay mal que por bien
no venga: aproveche la excusa celulítica para empezar a cuidarse.
Tratamientos
Martín-Gorgojo evita crear
falsas expectativas sobre el asunto: "No hay ningún tratamiento definitivo
contra la piel de naranja, sino paliativo. Podemos mejorar un poco la
apariencia de la celulitis, pero por lo general de forma temporal". ¿Por
qué? La respuesta es fácil de comprender: "Es difícil revertir la causa
fundamental de la celulitis, que es la debilidad de las fibras del tejido
conjuntivo que tenemos bajo la piel".
¿Cuáles serían esos
procedimientos estéticos más efectivos para intentar vencerla? "La
criolipólisis, empleada para la reducción de la grasa localizada; y la
radiofrecuencia, que mejora la firmeza y textura de la piel en casos
relacionados con flacidez". Como procedimiento en consulta, este
dermatólogo destaca la mesoterapia, "la rotura con una aguja especial de
los tractos fibrosos".
Usados para activar la
circulación de retorno, los masajes profundos de drenaje linfático también
pueden ayudar "a personas con tendencia a la retención de líquidos
asociada a la celulitis".
Cremas
Empleadas sobre la piel
como anticelulíticos, suelen presentar "una combinación de ingredientes dirigidos
a disminuir la inflamación, mejorar la microcirculación y reducir la flacidez
de la dermis", explica Martín-Gorgojo. Aunque los activos utilizados
"suelen encapsularse en forma de nanosomas o liposomas", es
complicado que lleguen a donde han de hacerlo para "ejercer un efecto real
en el sitio concreto donde está el problema".
Existen, además, otros
métodos en forma de parches o prendas (en oclusión) "con sustancias
dirigidas a tratar de mejorar la celulitis".
A pesar de que la
declaración de intenciones de todos estos cosméticos es inmejorable, su
eficacia no está lo suficientemente demostrada. "Hay pocos estudios,
elaborados sobre una pequeña parte de los cosméticos disponibles -no todos- y
con un número reducido de pacientes". La conclusión sería: "Su uso
continuado puede mejorar en parte la textura de la piel y contribuir a
disminuir el aspecto de la piel de naranja pero, por lo general, la mejoría es
discreta y transitoria". Es lo que hay.
Deporte
No obra milagros, pero
ayuda. "Se aconseja la práctica de actividades físicas a diario. Por
ejemplo, valdría con caminar ligero, al menos, durante 30 minutos cada jornada.
De esta manera, activaremos la circulación y tonificaremos la musculatura de
nuestras piernas", aconseja. Y es que, aunque la celulitis no tiene que
ver con la obesidad -aumento en número y tamaño de los adipocitos-, y no
distingue entre personas delgadas o con sobrepeso, es esencial que "se la
combata de forma global, mediante la adopción de una vida más activa y
saludable".
Nutrición
Allá donde no llega la
cosmética, triunfa una buena alimentación. "Afortunadamente para nuestra
salud, la piel es un magnífico impermeable que impide el paso al interior de la
mayoría de las sustancias que llegan a ella y sólo permite un paso mínimo de
algunas", asegura la doctora Ana Bellón. En la capa profunda de la piel
es, precisamente, "donde se forma la celulitis y donde tienen lugar los
procesos de revitalización y nutrición para la salud de la piel. Allí no llega
ningún cosmético pero sí los nutrientes eficaces", sostiene.
En las zonas donde hace su
aparición, encontramos «inflamación y edema». Se trata, por lo tanto, de dar a
nuestro cuerpo lo que está pidiendo a gritos: "Debemos incluir en nuestra
dieta verduras y frutas con capacidad antiinflamatoria y drenante". La
lista de las primeras es amplia y para todos los gustos: "Acelgas, apio,
berros, brócoli, espinacas, hinojo, pimientos verdes, coliflor, canónigos,
lechuga, rábanos, rúcula, pepino, grelos y endivias".
Para potenciar ese efecto
drenante tendríamos que consumir "alcachofas, cebollas, puerros, pimientos
rojos, coles, espárragos, tomates, cardos y judías verdes, entre otras".
En cuanto a las frutas, la
doctora del Centro Médico Bellón (Madrid) destaca, por su gran riqueza en vitamina
C, el poder regenerador de "las grosellas, el pomelo, las fresas, el
melón, las moras, la sandía, las frambuesas, la papaya, el melocotón, la
naranja, el kiwi, la manzana, la pera, la mandarina, el arándano y la
piña".
Al igual que el doctor
Martín-Gorgojo, Bellón resalta el papel benefactor del ejercicio físico en esta
lucha. "Es muy importante la realización de ejercicios específicos para
tonificar las zonas donde más frecuentemente se asienta la celulitis y también
es necesario tomar una cantidad de proteínas adecuada para mantener el músculo
en unas condiciones idóneas", añade. Para conseguirlo, recomienda la
inclusión en nuestra dieta habitual de "carne magra, pescado blanco y
huevos".
De la sal, mejor nos
olvidamos para siempre. Como aderezo de esas verduras y proteínas, nada como el
jengibre, la cúrcuma, o la pimienta. ¡Buen provecho!